El acoso laboral son comportamientos o amenazas inaceptables en el ámbito laboral que pueden provocar daño físico, psicológico, sexual o económico. La Organización Internacional del Trabajo (OIT), refiere que este tipo de conductas afecta la dignidad y la seguridad de las personas en su entorno de trabajo.
El régimen jurídico español tiene diferentes normas y leyes que abordan este tema, hablaremos de las más relevantes en este artículo.
En España, el Código Penal (artículo 173.1) sanciona el acoso laboral con penas de prisión desde seis meses hasta dos años, mientras que las leyes laborales exigen a las empresas establecer mecanismos de prevención y actuación para proteger a los trabajadores.
El artículo 4 del Estatuto de los Trabajadores garantiza el derecho de los empleados a la no discriminación, la integridad física y la protección contra el acoso. Reconoce estas situaciones como riesgos laborales, cuya prevención recae directamente en la empresa. Por su parte, la Ley Orgánica 3/2007 para la igualdad efectiva entre mujeres y hombres establece que el Protocolo Antiacoso o Protocolo de Acoso Laboral debe integrarse en el Plan de Igualdad, aunque este último no sea obligatorio para todas las empresas.
¿Quién está obligado a tener un protocolo de acoso laboral?
El protocolo de acoso laboral es una herramienta obligatoria para todas las empresas, independientemente de su tamaño o tipo de contrato.
Está diseñado para prevenir y erradicar situaciones de acoso, ya sea moral, sexual, por razón de sexo, hostil o físico, entre otros. Este protocolo protege a toda la plantilla, incluidos empleados en formación, prácticas o voluntariado, en cualquier contexto laboral, como viajes, eventos, espacios privados relacionados con el trabajo y casos de ciberacoso.
Además de implementar este protocolo, es fundamental garantizar su correcta difusión, seguimiento y actualización. Las empresas deben asegurarse de que todos los empleados conozcan su existencia y sepan cómo utilizarlo en caso de necesidad.
Tipos de acoso laboral
El acoso laboral puede manifestarse de diversas formas, entre las que destacan:
- Acoso vertical descendente (Bossing): Un superior acosa a un subordinado, a menudo con el objetivo de forzar su renuncia.
- Acoso vertical ascendente: Empleados hostigan a un superior, generando conflictos en la jerarquía.
- Acoso horizontal: Conductas abusivas entre compañeros del mismo nivel jerárquico.
- Burnout: Síndrome de agotamiento debido a sobrecarga laboral o malas condiciones de trabajo.
- Acoso severo: Incluye intimidación, insultos, abusos sexuales o violencia física.
Pasos generales para denunciar el acoso laboral
- Recopilación de Evidencias: Documentar todos los incidentes de acoso, incluyendo fechas, testimonios y pruebas físicas.
- Protocolo Interno: Activar el protocolo de acoso laboral establecido por la empresa.
- Inspección de Trabajo: Acudir a este organismo si la respuesta de la empresa es insatisfactoria.
- Vía Judicial: En caso de buscar reparaciones legales o sanciones adicionales.
El departamento de Recursos Humanos
El área de Recursos Humanos es clave en la prevención y gestión del acoso laboral. Sus responsabilidades incluyen:
- Implementar protocolos contra el acoso.
- Garantizar canales de denuncia confidenciales.
- Formar a los empleados en respeto, diversidad e inclusión.
- Actuar de manera decisiva y conforme a la ley en los casos reportados.
Recursos Humanos también debe garantizar que el protocolo sea difundido, comprendido y seguido por todos los empleados, promoviendo así un entorno laboral seguro y respetuoso. En una empresa de reducido tamaño no existe un area de RRHH per se, sino que este rol suele estar delegado en alguien que además cumple otras funciones. Es importante que quien sea en quien recaiga este rol conozca las obligaciones legales de este tipo.
Protocolos de actuación en la empresa
En España, todas las empresas están obligadas a contar con un protocolo de acoso laboral que contemple:
- Medidas Preventivas: Formación y campañas de concienciación para los empleados.
- Gestión de Denuncias: Procedimientos claros y accesibles para la recepción y análisis de quejas.
- Acciones Correctivas: Sanciones disciplinarias en casos confirmados de acoso.
Este protocolo debe aplicarse en cualquier contexto laboral, incluidos viajes, eventos o espacios privados relacionados con el trabajo, y debe abordar formas modernas de acoso, como el ciberacoso.
Obligaciones y sanciones empresariales
Las empresas tienen la obligación de adoptar medidas contra el acoso sexual y por razón de sexo, así como de garantizar un entorno laboral seguro y diverso. Esto incluye:
- Formación continua de empleados.
- Adopción de códigos de conducta claros.
- Implementación de políticas de igualdad efectivas.
El incumplimiento de estas obligaciones puede derivar en sanciones económicas que oscilan entre 7.501 y 125.018 euros, además de posibles pérdidas de beneficios fiscales y subvenciones relacionadas con el empleo.
Prevenir y gestionar el acoso laboral es una responsabilidad empresarial que beneficia a todos. Más allá de cumplir con la ley, establecer protocolos efectivos y fomentar la diversidad y la inclusión refuerza el clima laboral, protege a los trabajadores y fortalece la reputación corporativa.
Un entorno laboral saludable es clave para el bienestar de las personas y el éxito de las organizaciones. Contacta con nuestra área laboral para más información sobre cómo podemos ayudarte.
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