Como administradores de fincas sabemos que hoy en día la ocupación (okupacion) es un problema latente en nuestra sociedad que cada vez afecta a un mayor número de comunidades y de propietarios a los que prestamos servicios de administración. Una ocupación puede ser un gran quebradero de cabeza para la propiedad del inmueble y en determinados casos alcanza niveles macrosociales como ocurre en Madrid o Barcelona. Este artículo resume una serie de consejos para evitar la ocupación de tu inmueble o gestionarla con éxito si esta ya ha sucedido.
En este artículo no trataremos las causas y consecuencias jurídicas, sociales y económicas que han llevado a un marcado aumento de la ocupación. Hay multitud de opiniones sobre qué es este fenómeno o movimiento social que se identifica con esta palabra acuñada en los años 80. Desde una medida para paliar injusticias sociales o el simple oportunismo cada uno tiene una percepción distinta.
Ante una ocupación ilegal que se produzca en el edificio, es muy recomendable que la comunidad de vecinos o propiedad del edificio cuente con un administrador de fincas que asesore y ayude en las gestiones para prevenir y solucionar situaciones de este tipo.
Consejos para evitar la ocupación de tu inmueble
Las medidas que recomendamos para prevenir la ocupación de inmuebles se dividen en tres grandes áreas:
- Mantener las viviendas ocupadas.
- Visitarlas con frecuencia: coordinarse con vecinos en caso de que esto no sea posible.
- Mantener medidas de seguridad en puertas y ventanas y una alarma.
En casos de segundas residencias o activos inmobiliarios que están sin terminar o cerrados por disputas legales o con entidades financieras como la SAREB es importante asegurarse de que se aplican las dos últimas recomendaciones de forma estricta. Estos que son el tipo de inmueble más susceptible de ser ocupado.
Medidas para gestionar una ocupación que ya está teniendo lugar
- Mediación: en determinados casos un proceso de mediación puede dar lugar a un contrato privado que reconoce una serie de derechos y obligaciones para ambas partes, este puede ser un primer paso para regularizar la relación como inquilino o un abandono voluntario del inmueble. El objetivo es la finalización del conflicto evitando tener que litigar en los tribunales para recuperar la posesión pacífica de nuestro inmueble.
- Desahucio: puede siempre iniciarse un proceso de desahucio que en ocasiones finaliza con el lanzamiento de los ocupantes por la comitiva judicial con el auxilio de las fuerzas y cuerpos de seguridad. Este proceso acarrea costes y debido a la saturación del sistema judicial es lento. Según la dimensión de la ocupación esto puede ser un proceso además con una marcada carga emocional y costes de imagen.
- Pólizas de seguros: un seguro de protección de pagos de la renta y un buen seguro multirriesgo que cubra los posibles desperfectos y gastos que sean necesarios afrontar, sin duda alguna, serán de gran ayuda llegado el momento de cubrir los gastos que este tipo de situaciones conlleva.
Si eres propietario o copropietario de un edificio o inmueble y quieres saber cómo protegerlo o gestionar una situación de este tipo, no lo dudes, podemos ayudarte.
Para información sobre temas relacionados visita nuestra página sobre Administración de fincas.
