Anticipo de nómina a los trabajadores: ¿cómo funcionan?

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Anticipo de nómina: adelanto del salario para ayudar a los trabajadores a enfrentar emergencias económicas de forma rápida y sencilla

Uno de los mayores placeres como trabajador es cuando es momento de cobrar. Ese deseado anticipo de nómina siempre parece tardar en llegar, y muchas veces podemos necesitarla más de lo que parece. Por eso existen ciertas circunstancias en las que se pueden pedir a la empresa anticipos sobre la nómina.

Para ello es importante saber cómo funciona y si se puede demandar bajo cualquier circunstancia. Pese a que siempre recomendamos contar con el asesoramiento continuado de una gestoría, hoy queremos hacer una pequeña introducción a los anticipos para que sepas que es posible, y un derecho como trabajador, pedirlos. ¿Listo?

¿En qué consisten los anticipos sobre nómina?

Los anticipos sobre la nómina son adelantos de salario que una empresa hace a sus trabajadores antes de la fecha de pago establecida. Por lo tanto, el empleado recibe una parte de su sueldo antes del día habitual de cobro que luego se descuenta del salario correspondiente al periodo en que se otorgó el anticipo. Es posible confundirlos con los dividendos, pero se trata de otro tipo de beneficio al que, como trabajador, tienes derecho.

Es necesario destacar que la empresa no está obligada a ofrecer estos anticipos a menos que se haya establecido en un convenio colectivo o en el contrato de trabajo. También es cierto que el mismo no puede superar la proporción de los días trabajados hasta la solicitud del anticipo y solamente se puede demandar en ciertas situaciones, que explicaremos más adelante.

Requisitos

Existen ciertas características que el trabajador debe cumplir para que se le autorice un anticipo de nómina. Normalmente variarán dependiendo de la política de la empresa, la legislación del país y el tipo de contrato laboral. Para que te hagas una idea, los más comunes que se suelen exigir son los siguientes:

Antigüedad mínima

Algunas empresas requieren que el trabajador lleve un tiempo mínimo antes de poder solicitar un anticipo de nómina, que puede variar desde unos pocos meses hasta un año. Este requisito busca garantizar que el empleado tenga una relación laboral estable y que se supone que continuará trabajando en la empresa para poder descontar el anticipo en su próximo salario.

Motivo justificado

En algunos casos, las empresas solicitan una justificación para el anticipo, como un gasto imprevisto, una emergencia médica o necesidades personales urgentes, aunque no es  algo común en todas las compañías.

Cantidad máxima permitida

Las empresas suelen establecer un límite sobre el total que se puede solicitar como anticipo, que generalmente es un porcentaje del salario mensual (por ejemplo, un 20% o 30%). De esta forma se evita que el empleado se quede con un salario demasiado reducido cuando llegue la fecha de pago. Algunos negocios también limitan el número de anticipos que un empleado puede solicitar en un año para evitar que se vuelva una práctica recurrente.

Historial laboral

Es posible que algunas empresas tengan en cuenta el desempeño del empleado y su historial laboral antes de aprobar sus anticipos. De hecho, puede ocurrir que, si un empleado ya ha recibido un anticipo previamente y no lo ha liquidado completamente, la empresa no le conceda uno nuevo hasta que haya pagado el anterior.

Política de la empresa

Las políticas de cada empresa pueden establecer reglas adicionales, como la necesidad de aprobación por parte del supervisor inmediato o del departamento de Recursos Humanos. En algunas organizaciones, la disponibilidad de recursos financieros puede ser un factor para conceder anticipos, especialmente en empresas más pequeñas o con limitaciones de flujo de efectivo.

Contrato de trabajo y normativa laboral local

Los empleados con contratos fijos a tiempo completo suelen tener más facilidad para acceder a anticipos, mientras que en el caso de los temporales, esta puede estar sujeta a condiciones específicas del contrato.

En algunos países las leyes laborales establecen regulaciones sobre la concesión de anticipos de nómina, incluyendo límites sobre las cantidades o la forma de descontarlos de futuros salarios. Las empresas deberán siempre cumplir con estas regulaciones para evitar problemas legales.

Solicitud formal y proceso interno

La mayoría de las empresas requieren que el empleado presente una solicitud formal, ya sea por escrito o mediante un sistema interno de la empresa. En algunos casos es posible que incluso deba firmar un acuerdo donde acepte los términos del anticipo, como la forma en que la que se descontará de su próximo salario.

¿Qué obtiene el empleado de los anticipos?

Este tipo de procesos benefician principalmente al empleado, ya que si necesita este tipo de anticipos es porque debe de haber ocurrido algo que le obligue a demandarlos. Los beneficios que puede obtener van mucho más allá de una simple cantidad de dinero. Hablamos, por ejemplo, de:

Un acceso rápido a liquidez

Uno de los principales beneficios de un anticipo de nómina es que el empleado acceda rápidamente a una cantidad de dinero para cubrir gastos urgentes, como reparaciones de vehículos o cualquier otro gasto inesperado. De esta forma puede evitar la necesidad de recurrir a préstamos informales, tarjetas de crédito con intereses elevados o líneas de crédito que pueden generar una carga financiera adicional.

La reducción del estrés financiero

Tener la opción de recibir un adelanto puede disminuir la ansiedad y el estrés relacionados con la falta de dinero antes de la siguiente fecha de pago. Cuando un trabajador sabe que tiene esta alternativa, es más probable que se sienta seguro y tranquilo, cosa que acaba generando un impacto positivo en su productividad y su actitud en el trabajo.

Mayor flexibilidad financiera

Los empleados pueden gestionar mejor sus finanzas personales, especialmente si sus gastos no coinciden con el ciclo de pago de la empresa. Para algunos, tener acceso a un anticipo les permite manejar mejor sus ingresos y organizar sus gastos de manera más eficiente a lo largo del mes.

Menor gasto

A diferencia de los préstamos personales o las tarjetas de crédito, los anticipos suelen ser una forma más económica de acceder a dinero, ya que muchas empresas no cobran intereses o, si lo hacen, suele ser en una tasa muy baja.

Un mayor control sobre los ingresos

Los trabajadores saben exactamente cuánto dinero se descontará de su próximo salario, lo que les permite planificar con antelación. Al ofrecer esta opción, las empresas demuestran que se preocupan por el bienestar financiero de sus empleados, cosa que puede aumentar la lealtad y satisfacción de los trabajadores.

La anulación de una situación de morosidad

Un anticipo de nómina puede ayudar a que el empleado pague a tiempo facturas de servicios como electricidad, agua o alquiler, evitando  así recargos o intereses por pagos tardíos. Acceder a estos adelantos ayuda a mantener un buen historial crediticio al permitir a la persona cumplir con sus obligaciones financieras a tiempo.

¿Cuándo se conceden?

Pese a todos los beneficios que se pueden obtener de ellos, los anticipos de nómina se conceden bajo ciertas circunstancias que pueden variar según la política de la empresa y la legislación del país. Algunas de las situaciones más comunes en las que un empleado puede solicitarlos y recibirlos son:

Emergencias financieras

Es común que las empresas otorguen anticipos en situaciones de emergencia, como reparaciones urgentes en el hogar o la necesidad de cubrir algún gasto imprevisto importante.

Fechas especiales o festividades

Algunas empresas permiten a los empleados solicitar un anticipo del aguinaldo o de otros bonos antes de las festividades más destacadas del calendario para cubrir los gastos adicionales que suelen surgir en esas épocas. Suele ser también normal que, por tanto, algunas de las épocas en las que más se pidan sea antes de las vacaciones de los trabajadores para tener más fondos disponibles durante su tiempo libre.

Políticas de la empresa

Algunas empresas tienen políticas claras que permiten a los empleados solicitar su anticipo de nómina en cualquier momento hasta un porcentaje específico de su salario mensual. Estas suelen incluir reglas sobre la cantidad máxima que se puede adelantar y el número de veces que se puede solicitar al año.

De hecho, muchas de ellas poseen programas específicos de bienestar financiero que incluyen el acceso a anticipos como un beneficio adicional para sus empleados, dándoles mayor flexibilidad para gestionar sus ingresos.

Periodos de prueba o contratos temporales

En ciertos casos los trabajadores en periodos de prueba o con contratos temporales pueden negociar un anticipo de nómina como parte de su acuerdo laboral, especialmente si tienen necesidades inmediatas y el periodo de pago es largo. Todo dependerá de la empresa, pero en algunos contextos es posible que un empleado nuevo solicite un adelanto si tiene necesidades financieras urgentes y esta lo considera como parte de un acuerdo de buena fe.

Programas de anticipo digitales

En los últimos años han surgido plataformas digitales que permiten a los empleados acceder a una parte de su salario ya devengado antes de la fecha de pago. Los empleados pueden así solicitar anticipos de forma más ágil a través de una app o sistema de la empresa y usualmente se otorgan de manera automática, dependiendo de las horas trabajadas acumuladas.

Acuerdo entre el empleado y el departamento de RRHH

En la mayor parte de los casos, los anticipos se conceden tras una conversación entre el empleado y el departamento de Recursos Humanos. Si la necesidad del empleado es razonable y el presupuesto de la empresa lo permite, suele ser aprobado. Es necesario tener en cuenta que la antigüedad del empleado, su desempeño laboral, su historial con la empresa y la política de la empresa sobre anticipos influirá siempre en la decisión final.¿Quieres saber si puedes pedir un anticipo en tu empresa o quieres asesoramiento sobre este o cualquier otro tema laboral? En Blegal contamos con un equipo de servicios laborales que te ayudará a prevenir y resolver cualquier situación en el área laboral, por compleja que sea. Solamente tienes que ponerte en contacto con nosotros para que podamos comenzar a trabajar juntos en cualquier aspecto que necesites. ¿Hablamos?

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